(Mientras mi pc se despegaba xD redacté mentalmente lo que iba a escribir aquí y llegué a un punto tabú. El futuro. Hoy
Está bien, comienzo.
Como el título indica, hablaré de los kanji, no, no de la raza superior kanjística de la cual soy miembro xD, si no de los caracteres -ideogramas- chinos que adoptó -cof, robó, cof- el idioma japonés para su "facilísima" escritura.
Muchos –ok, todo el mundo-, sabe que quiero aprendérmelos, y hoy les revelaré uno de los motivos que mantenía en secreto… Haced sonar los tambores, que se viene la revelación del año… ¡Me haré un tatuaje con un kanji! ¡Temblad de envidia mortales lectores! Y cuento con más apoyo paterno del que he contado en toda la historia de mis “body arts” (léase, mis piercings). Antes ninguno de mis padres me apoyaba, ahora me apoya mi mamá.
Pero una que ya es responzable debe tomarse estas decisiones con mucha calma y responzabilidad, después de todo, en esta época los tatuajes duran más que los matrimonios, así que debe tomarse aún con más seriedad: Estos sí son para toda la vida.
(Vale, todos menos mi matrimonio con Felipe, ese será para toda la vida, o como los mormones: Para toda la eternidad… Cuidado Felipe con andar mirando a otras cuando seas fantasma.)
Pero creo haber dejado el punto claro: Estos tatuajes no se saldrán en un par de días como los que regalaban en los chicles, no, estos no saldrán a menos que estés dispuesta a quitártelo quirúrgicamente… ¡Y eso si que no!
Y si para elegir el kanji correcto que llevaré tatuado en la piel, he de estudiar japonés en
Mi kanji favorito irá ahí, en el pecho, debajo de la clavícula. (Un plagio al tatuaje de Sandra, hay que decirlo, pero que quede en secreto, ok?) Total ella no sabe el link de mi blog :D